Icono del sitio BLOGACINE

La generación X, el relevo generacional del cine español

Celda 211 de Daniel Monzón

Celda 211 de Daniel Monzón

Celda 211 de Daniel Monzón
Celda 211 de Daniel Monzón

El Cultural de España publicó en días pasados un reportaje sobre la revolución en marcha en el cine español, encabezada por un grupo de jóvenes productores y directores que buscan un cine más conectado con el público, no quieren depender de los subsidios oficiales y no se conforman con el mercado local.

La pieza periodística arranca con una buena descripción de los ideales de la nueva generación:

Tienen entre 30 y 40 años. Al principio se sentían marcianos en el establishment del cine español pero hoy pisan fuerte. Una nueva generación está transformando de una forma rotunda el panorama audiovisual con el objetivo descarado de conquistar al mayor número posible de espectadores. No quieren depender de las subvenciones ni temen salir a buscar financiación fuera de España. Renuncian a viejas etiquetas del cine de autor para apostar por un cine enfocado al público que no reniegue de la ambición artística. Para ellos, la promoción y el marketing son fundamentales. Les seducen las coproducciones pero también realizar películas cien por cien españolas con abultados presupuestos que les den un look atractivo. Porque quieren que sus películas brillen no sólo por su talento, también por su excelente factura.

El grupo, integrado por Emma Lustres, Juan Romero, David Matamoros y Fernando Bovaira, entre otros; ha sido bautizado por Variety como La Generación X.

Emma Lustres, de apenas 35 años y cabeza de Vaca Films, la productora de la estupenda y taquillera Celda 211, no duda en hablar de choque generacional y resume los puntos esenciales de esta ruptura:

  1. Nos involucramos en la parte creativa.
  2. Somos más ingeniosos a la hora de buscar financiación.
  3. Tenemos en cuenta el mercado internacional desde el minuto uno.
  4. Buscamos proyectos más comerciales y no nos interesa el tradicional “cine social” que se ha hecho en España y
  5. La mayoría estamos formados en la Universidad específicamente para este trabajo.

El resultado de estos factores serán películas más de productor que de director, lo mismo que sucede en Hollywood. Y creo que eso es bueno porque se trata de producir filmes que gusten a la gente. Eso significa pensar desde el primer momento cómo vamos a venderlo, a qué publico puede interesarle y etc, cosas que corresponde a los productores pensar, no a los directores. Ya no basta, como hasta hora, con ‘hacer’ la película…

Se me antoja que no el del cine español no es un caso aislado. En todo el tiempo que he venido escribiendo este blog, he podido ser testigo del despegue las cinematografías de varios países gracias a la emergencia de una nueva generación de realizadores formados en las aulas, que se han aprovechado del huevo dejado por el declive creativo hollywoodense: la colombiana, la chilena y, ahora, la venezolana. El caso mexicano y el argentino merecen mención aparte.

¿Están de acuerdo en que una generación de relevo está inyectándole nuevas energías a las cinematografías regionales? ¿Qué opinan del caso venezolano?

Celda 211 | Trailer

[youtube]http://www.youtube.com/watch?v=NJQNHHcExMw[/youtube]

Salir de la versión móvil